martes, 10 de noviembre de 2009

tres

La realidad es un lujo que no esta al alcance de todos, creo.
Yo, por citar un ejemplo al azar, tengo la sensación de vivir en una redundante irrealidad. Una inexistencia que roza lo pedante; Aburrida,en todo caso. Similar a la euforia etílica, solo que sin los momento previos y constante.
Como un disparo a bocajarro de tinto barato que se filtra, dosificado, en el torrente sanguíneo, alterando el orden natural de las cosas, retrasando la llegada de la resaca, pero sin dejarte olvidar que ese momento llegara inexorable y por la espalda, a traición. Las formas, los colores y las texturas, se mantienen inalterables durante mis episodios de incoherencia metafisica.
Empíricamente no dudo de la existencia de la realidad (sea lo que sea) y de las cosas que habitan en ella.Mi problema es : ¿que papel juego yo ?.
Soy un niño que se cree Superman.
Soy un niño, que se cree Superman, por llebar sobre los pantalones una bragas de nochevieja y una toalla atada al cuello.
Soy un niño, que no entiende que si salta por la ventana, no solo morirá, sino que morirá vestido de mamarracho.
Como un dibujo animado.Episódico. Sin antecedentes, ni consecuencias. Como Kenny, puedo morir una y otra vez.Motherfucker

1 comentario:

  1. y tú hablas de muerte??? dicen..que hasta que no se aprende a vivir no se pueede hablar de muerte, y tú? sabes viviR?

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